Ordenando la casa encontré un bote de shampú de niño
Mi hijo era pequeño y aun lo bañaba
Ahora ya nadie usa esa ducha porque ya no está conmigo
Ya es un chico grande
Un cuasi adulto
Un proto hombre que se prepara para el mundo
Quiere ser economista
Nada más lejos de un poeta que los números
Nada más lejos que un poeta
Mi hijo ha crecido y busca su camino
Es lo normal
Pero limpio la casa y encuentro pequeñas cosas que me recuerdan
Que el paso del tiempo no es lo que uno quisiera que pasara
Uno quiere la foto
La permanencia
No irse muriendo con el reloj en reversa en cada respiro
Esto es una historia de amor
La vida
Uno nace a este planeta para morir
En medio quedamos nosotros y la red que tejemos
Somos las arañas sentimentales
Esto es una historia de deseo
Deseamos que nada pase que todo vaya bien
Pero es imposible porque justo en el ombligo tenemos el caos
Unos se hacen trabajo y mundo
Los incapaces tomamos el lenguaje y allí está
Un poema porque a la mierda todo
Y creemos que con eso ya se resuelve pero no
Viene otro y otro sin remedio
La vida desgajándose mientras tanto
Vi un documental de la Antártica y los pingüinos emperadores se agrupan
Pero uno
Alguno de esa masa de plumas se escapa hacia el continente
Y camina y camina
Se adentra a la nada
A la inevitable muerte sin detenerse
Bambolea su cómico cuerpo de izquierda a derecha y deja huellas
Un camino para su ruina y la duda de los otros
¿Por qué lo hace?
¿Qué le hizo separarse de la colonia?
¿Sabe que va a morir porque allá enfrente no hay vida?
Mi hijo a los cinco años me hizo un retrato perfecto
Acá hay un juguete de él
Una playerita que una vez le quedó
Él ya no tiene memoria de ese tiempo
O sus recuerdos serán otros
El padre ausente
Los domingos lentos caminando juntos y yo contando historias
Que talvez atesora
El ejemplo que le puse de una vida sumida en el arte
El sacrificio de elegir el lenguaje sobre la normalidad
El desgajarse a las ocho de la noche cuando me iba
Vaya daño
Vaya vida
Circula la noticia que nuestra Emperatriz de los Pingüinos
Isabel de los Ángeles Ruano
Está mal de salud perdida en sus cordilleras internas
Su camino está por terminar y lo atestiguamos
No podemos hacer nada
Nada más lejos de un poeta que los números
Bello Juan Pablo! que poema más bello. Siempre es un deleite leerte.
ResponderEliminarEsto es demasiado. Gracias. Vivo a través de tu poema. Gracias.
ResponderEliminarPuro calidad mi compa. Pero Isabel siempre renacera, por allí por el ministerio de gobernación andará otra sin saberlo. Nada más lejos que una poeta orinandose a media calle de la muerte. Nada más cerca por otro lado. Por ejemplo mi papa que es un perito contador, y yo que también he dicho que lo soy aunque no de números. Nada más cerca que un auditor de versos, un economista de sustantivos innecesarios.
ResponderEliminarPuro calidad mi compa.
¡Hola Juan! Hermoso poema. ¡Viva Guatemala! :)
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